Los medicamentos nos ayudan a vivir más tiempo y de forma más saludable, pero pueden tener efectos secundarios en el organismo debido a sus componentes o a la propia naturaleza de la persona.
Un tipo de efecto adverso que no es alarmante, pero que puede llegar a afectar la calidad de vida de un individuo, es la ototoxicidad.
¿Qué es la ototoxicidad?
“Ototoxicidad” es el término usado por los profesionales de la salud para hacer referencia a los efectos nocivos sobre el sistema auditivo, transitorios o permanentes, inducidos por fármacos. Cualquier medicamento de uso común, tanto de venta libre como recetado, con capacidad de afectar al sistema auditivo, se considera “ototóxico” (oto: oído y tóxico: nocivo). Por lo tanto: “ototóxico” significa “nocivo para el oído”.
Los fármacos ototóxicos pueden dañar la audición o empeorar un problema auditivo ya existente.
¿Cómo nos afectan los medicamentos ototóxicos?
La exposición a fármacos ototóxicos puede dañar a las células ciliadas de la cóclea y ocasionar zumbidos en los oídos (tinnitus) y/o hipoacusia unilateral o bilateral. La deficiencia auditiva suele ser temporal, es decir, la audición se recupera al dejar de tomar la medicación. Pero en ocasiones puede ser irreversible como consecuencia de un daño permanente en el oído interno.
También es posible que los fármacos ototóxicos afecten al aparato vestibular y ocasionen trastornos del equilibrio: mareos, vértigos, incoordinación en los movimientos o inestabilidad en la marcha.
¿Cuáles son las posibilidades de sufrir pérdida auditiva por ototoxicidad?
No todos las personas tratadas con fármacos ototóxicos desarrollan trastornos auditivos. Depende de muchos factores, entre otros: la dosis del medicamento, la duración del tratamiento, la predisposición genética, la exposición previa a fármacos ototóxicos, la utilización simultánea con otro fármaco tóxico, los trastornos auditivos previos, la edad (niños y ancianos tienen mayor riesgo) y el mal funcionamiento renal y/o hepático que dificulta la eliminación del fármaco del organismo. En algunos casos, la exposición a ruidos fuertes mientras se toman ciertos medicamentos intensifica sus efectos nocivos.
Medicamentos que pueden dañar al sistema auditivo
La lista de fármacos ototóxicos es bastante amplia. Entre los medicamentos que pueden producir una pérdida de audición temporal se incluyen fármacos de venta libre y uso común, como la aspirina en el caso de ser ingerida en grandes dosis. También al paracetamol y los antiinflamatorios no esteroides como el ibuprofeno y el naproxeno.
Algunos antibióticos conocidos como aminoglucósidos (por ejemplo: gentamicina, estreptomicina y neomicina), eficaces en la lucha contra las infecciones, se encuentran entre los fármacos con mayores probabilidades de causar daño auditivo permanente. También las drogas usadas para el tratamiento del cáncer, como el cisplatino y el carboplatino.
Del mismo modo, es posible que produzcan pérdida de audición los medicamentos diuréticos (furosemida y bumetanida) indicados para tratar una variedad de condiciones de salud que incluye edemas, hipertensión arterial y glaucoma.
Si se sabe que un fármaco provoca pérdida auditiva, ¿por qué se utiliza?
A veces no hay otras opciones terapéuticas y hacer uso de medicamentos ototóxicos es inevitable. El fármaco recetado puede ser el único medicamento de que se disponga para detener una infección grave o curar una enfermedad potencialmente mortal como el cáncer.
¿Qué se debe hacer al encarar un tratamiento con medicamentos ototóxicos?
En la medida de lo posible se debe evitar la utilización de medicamentos ototóxicos, y usarlos con precaución en personas mayores, niños, embarazadas y quienes tienen una pérdida de audición preexistente.
Cuando se tome la decisión de tratar una enfermedad o condición grave con medicamentos ototóxicos, el médico debe prestar atención minuciosa a la audición y al equilibrio de la persona, antes y durante el tratamiento, ya que los síntomas son signos de alarma tardíos de los daños causados por el fármaco.
La evaluación incluye una prueba de audición que muestre la habilidad de percibir sonidos de distintas tonalidades, un test para evaluar la capacidad de identificación de palabras y pruebas otoneurológicas para detectar toxicidad vestibular. La información obtenida ayuda al médico a tomar decisiones importantes sobre si se ha de discontinuar o cambiar el tratamiento antes de que la audición sufra una lesión irreversible.
Ante la presencia de zumbidos, disminución auditiva o pérdida de equilibrio al consumir un medicamento de los considerados ototóxicos, es de fundamental importancia informar inmediatamente al médico que lo recetó.
Automedicación: una costumbre tan peligrosa como cotidiana
Cada vez son más las personas que utilizan medicamentos por iniciativa propia, sin ninguna intervención médica (ni en el diagnóstico de la enfermedad, ni en la prescripción del fármaco ni en la supervisión del tratamiento).
Es importante considerar que los medicamentos pueden actuar de forma diferente en personas con más o menos sensibilidad o resistencia a ellos. Además, todos tienen efectos colaterales o secundarios. En ocasiones se acumulan, algunas veces se potencian y en otras pueden perder eficacia. Por lo tanto, no hay que perder de vista que los medicamentos son eficaces y beneficiosos solo cuando se utilizan bajo prescripción y control médico.
Tenga presente que algunos fármacos son ototóxicos y pueden dañar su audición o bien agravar un problema auditivo ya existente. Tome medicamentos bajo prescripción médica, NO SE AUTOMEDIQUE.
Fuentes
Healthy Hearing: “Drugs that have hearing loss and tinnitus as side effects”. Contributed by Joy Victory, Last updated Nov. 4, 2021
Canadian Audiologist: “Ototoxicity and Vestibular Dysfunction”. By Darren Tse. Vol. 4, Issue, 2017
HNO: “Pharmacological intervention in the field of ototoxicity”. By G. Laurell. Vol. 67, 434-439 (2019). DOI: https://doi.org/10.1007/s00106-019-0663-1
Manual MSD – Versión para público general: “Trastornos del oído causados por fármacos (Ototoxicidad)”. Por Lawrence R. Lustig. Última revisión completa junio 2021
Última revisión completa jun. 2021
The University of Melbourne. Faculty of Medicine, Dentistry & Health Sciences. Melbourne Audiology & Speech Pathology Clinic: “Ototoxicity related hearing loss”
Instituto ORL – IOM: “Medicamentos ototóxicos”. 17 enero 2021
QUIERO OÍR – Una iniciativa de Danavox: “Medicamentos ototóxicos que pueden causar pérdida auditiva”. 5 enero 2018
Hear-it.org: “Los medicamentos causan pérdida de audición”. 23 agosto 2016
Organización AARP: “Medicamentos que pueden afectar la audición”. Por Katherine Bouton. 2016
Hospital Alemán, Ciudad de Bs. As. (Argentina): “Los riesgos de la automedicación”. Por Dra. Elizabeth Idaberri